soy mi propio monumento histórico en llamas

yo también soy como la catedral de notre dame
espontáneamente me prendí fuego por completo

una vez leí que la gente de mi signo zodiacal
pasa por largos períodos de transmutación y pérdida

¿cuántas veces pensás que te moriste?
hay pocas cosas tan dolorosas como morirse
pero no del todo, morirse no de cuerpo sino como
despertarse a la mañana llorando
salir de la cama y mirar la luz de la heladera

no la comida en la heladera, sino la luz
cuál halo místico que te transporta a
tiempos mejores. arrastrarte hacia donde sea
que tengas que ir, pero nunca llegar.
nunca llegar a ningún lado:
querer volver, pero no tener a donde.

yo también soy catedral de notre dame porque
en un momento me creí las columnas más fuertes
y me di cuenta tarde que no era más
que una pila de escombros

quizá hasta tengo gárgolas, aterradas
en los hombros
y diciendo tipo “fuck off, perra, ni se te ocurra entrar”
pero el corazón en realidad que dice “vení vení
dale vení”
y todo genera siempre una confusión horrible
en la que de nuevo
terminás mirando fijo la luz de la heladera.

podría agradacerle al dolor y a la confusión
y a las heridas que todavía tengo en los brazos
entre las que a veces meto los dedos, 

por puro morbo
el haberme hecho la persona que soy ahora

pero la verdad es que si pudiera elegir,
elegiría no haber sufrido nunca nada
como un pollito bebé flotando en una nube o algo así

hay fantasmas que todavía me siguen y me aterran.
me consuelo
pienso que estoy creando cosas, y que quien da vida
no puede ser tan malo. pero quizá no estoy
creando nada. quizá solo estoy reparando cosas.

tal vez mi vida a partir de ahora
sea rellenar los huecos con la mano.
tengo destino de poxyran. tal vez pueda rearmar
la catedral con la gotita. quizá si juntara
los pedazos de todas las que fui
y rompi
podríamos hacer un monumento
a mí misma, para celebrar
cada segundo que no sigo rompiendo otras cosas

¿merezco un monumento por no cagarla tanto?
tal vez no. pero si no me rezo plegarias a mí misma
¿quién me reza? ¿quién me besa la frente a la noche?
creo que ya pagué unas cuantas deudas.
creo que ya me incineré y llevé
mi propio humo amarillo al cielo.

puede que por fin sea la hora de estar bien
y se venga el día en que finalmente
 pueda darle vida a algo

si logro lavar la culpa de mis pies
si logro lavar la culpa de mis manos
reconstruir mi espina, de a pedacitos
mirarme al espejo y ya no ver derrumbe
tocarme las piernas y no arrancar cascaritas
si logro entender
mis dolores heredados
puede que las cosas buenas
por fin nos vayan llegando


y perdón, si no me las merezco
lo entiendo
pero igual les pienso abrir los brazos